24/12/2010

Los hermanos Pou en Viana

El pasado 23 de Diciembre a la tarde, disfrutamos con el audiovisual y posterior coloquio que nos presentaron los escaladores Iker y Eneko Pou en la sala Navarro Villoslada. Conforme iba apareciendo cada unos de los 7 objetivos que se plantearon, ambos hermanos microfono en mano describian las imagenes y nos detallaban los pormenores de cada una de las ascensiones. Tras una hora de proyección y breve coloquio; salida al bar Rutas a compartir una cerveza. Finalmente las prisas inicales se convirtieron en una cena en el Bar San Juan en la que compartimos buenas viandas con los detalles y nuevos proyectos que tienen en mente.

06/12/2010

7 Paredes 7 Continentes: una vuelta al mundo en vertical

La pelicula sobre esta aventura, la podremos ver en Viana en la sala Navarro Villoslada este mes de diciembre, probablemente el jueves 23. Organiza: Vianatrekking y ayuntamiento.


Este inédito y atractivo proyecto de los hermanos vitorianos nació en el año 2002, fruto de querer llevar a la práctica sueños inalcanzables a ojos de la mayoría. Así se dispusieron a realizar un viaje alrededor del mundo en el que cada etapa les llevaría a establecer nuevas fronteras en la escalada. Su objetivo era realizar en la modalidad de escalada libre la pared que, a su juicio, pudiera ser la más emblemática de cada continente, buscando siempre rutas de máxima dificultad.
En el año 2003 realizaron las dos primeras etapas en América del Norte (El Capitán, Parque Nacional de Yosemite) y Europa (Naranjo de Bulnes, Picos de Europa). En 2004 viajaron a la isla de Madagascar (África), donde se encuentran las paredes del Tsaranoro. En 2005, en Tasmania (Oceanía), escalaron el Tótem Pole, la pared de escalada más estética del mundo y el verano de ese mismo año hicieron cumbre en la Torre Sin Nombre, en el Himalaya (Asia). La sexta etapa les llevó hasta la Patagonia, donde al segundo intento consiguieron escalar el Fitz Roy, que está entre las montañas más difíciles de la Tierra. Lo consiguieron el 25 de diciembre de 2007.

“Cuando comenzamos, nunca hubiésemos podido hacer la Antártida como primera pared. Y ahora, hemos terminado el proyecto de escalada más importante del mundo”, concluye Eneko.
Resumen de escaladas:
Continente: América del Norte
Lugar: El Capitán / Parque Nacional de Yosemite
Vía: El niño
Dificultad: 8a+/b

Continente: África
Lugar: Tsaranoro / Madagascar
Vía: Brave les filles
Dificultad: 8b+

Continente: Europa
Lugar: Naranjo de Bulnes / Picos de Europa / España
Vía: Zunbeltz
Dificultad: 8b

Continente: Oceanía
Lugar: Totem Pole / Tasmania
Vía: Totem Pole
Dificultad: 7b

Continente: Asia
Lugar: Torre Sin Nombre / Torres del Trango / Himalaya
Vía: Variante Hermanos Pou
Dificultad: 7b

Continente: América del Sur
Lugar: Fitz Roy / Patagonia
Vía: Supercanaleta
Dificultad: 6c

05/12/2010

Maridomingi y Olentzero

Ese invierno nevó mucho. La nieve parecía la nata de los pasteles. Daban ganas de comérsela. La nieve lo cubría todo y resultaba tan bonito que parecía que no hacía frío. Y donde no hacía frío era en ese lugar tan escondido del bosque donde el  carbonero fabrica su carbón. Las ardillas y los ciervos acuden al calor de la carbonera para calentarse mientras se quema la madera que luego  será carbón, y que servirá para cocinar en navidades Maridomingi, que así se llamaba la mujer del carbonero, aguardaba con una gran sonrisa a que su marido volviera del bosque. La casita donde habitaban los carboneros era muy humilde pero no faltaban nunca preciosas flores en la ventana. Maridomingi las cuidaba con esmero para que así, su casa, rebosase de alegría. Con el carbón no se ganaba demasiado, y en la casa tan sólo podían permitirse una vaca. -¿Qué haremos cuando llegue la primavera? -pensó Maridomingui, ¿Cómotrabajaremos la tierra? Su marido le advirtió que tendría que ir al mercado, -Allí cambiaremosla vaca por un caballo y así nos ayudará para arar la tierra en primavera. -Y además también te ayudará a traer el carbón del bosque, dijo entusiasmada Maridomingui. Así fue como el carbonero enfiló el camino del pueblo hacia el mercado para intentar hacer el trueque que su mujer le había sugerido. El sol empezaba a salir entre la montañas, y la nieve reflejaba sus rayos como un diamante logrando el día más luminoso del año. Silba que te silba hasta la vaca se aprendió la canción del carbonero, que dice así: "En invierno cojo la leña y con el hacha la hago pequeña Con fuego, con esmero y el truco del carbonero Consigo carbón el primero, la la la" Entre estrofa y estrofa se encontró con otro caminante que iba acompañado de una espectacular cabra. Era la cabra más bonita que había visto nunca.
-¡Qué cabra más bonita!, comentó el carbonero al caminante.
-Pues si le gusta, dijo el caminante, se la cambio por su vaca.
Y así fue cómo sin darse cuenta caminaba silbando la canción del carbonero hacia el pueblo, cogiendo de la soga, esta vez, una cabra. Bajando por la senda vio a un hombre con un ganso y, sin pensar, se dio cuenta de que iba caminando hacia el pueblo con el ganso cogido de la soga y cada vez que cantaba la canción del carbonero el ganso le interrumpía con su cuá, cuá, cuá.
El carbonero iba feliz admirando lo bonito que era el ganso cuando tropezó con otra persona que se dirigía al mercado con un hermoso gallo. Ya no se acordaba por qué iba al mercado pero ahora el carbonero caminaba con un gallo en sus brazo El humo de las chimeneas de las primeras casas del pueblo se adivinaba
por el horizonte y en los graneros de las afueras una mujer amontonaba estiercol.
Y NO OS LO CREERÉIS.
Cambió el gallo por un saco de estiércol. Esta vez sí que la había hecho buena nuestro carbonero.
Entraba ya en el pueblo y en sus manos llevaba simplemente un saco de estiércol. Ni la vaca, ni el ganso, ni el gallo, un saco de caca de vaca…Entonces le dio vergüenza llegar a casa con eso y pensó que en el
mercado quizás alguien lo cambiara por un caballo, pero no tenía muchas esperanzas.
Se sentó en un banco triste y abatido junto a una anciana. A ella le contó como Maridomingi le había mandado con la vaca a cambiarla por un caballo y había vuelto con un saco de estiércol.
La abuelita le advirtió que Maridomingui se enfadaría mucho, pero el carbonero le dijo:
-Maridomigi y yo nos queremos mucho y nunca nos enfadamos.
A lo que la anciana le respondió: -No me lo creo, lo que has hecho es muy serio, y te apuesto este cofre de oro a que tu mujer te regaña. Si te regaña los dos tendréis que ser mis sirvientes, tooooda la vida.
Debajo de los harapos de la anciana se escondía en realidad Maricastaña la bruja de los bosques a la que le encanta jugar, sobre todo en Navidad. El carbonero aceptó la apuesta. Al llegar al hogar Maridomingui estaba regando sus plantas y escuchó atentamente como había cambiado su marido la vaca por una cabra. -¡Qué bien!, le respondió, haremos quesos con su leche, qué ricos.
Después el carbonero le puso al día de la historia del ganso.
-Ideal, dijo de nuevo risueña su mujer, así haremos almohadas con sus plumas para poder descansar bien, que es lo más importante.
-Ya, ya, sollozó el carbonero mirando al suelo, -Pero es que luego, lo cambie por un gallo.
-¡Qué idea más buena tuviste! Así nos despertaremos siempre pronto por la mañana con el canto del gallo, dijo entre gritos de alborozo Maridomingui.
El carbonero ya no sabia a donde mirar cuando le contó el ultimo cambio que había hecho y le enseño el saco de estiércol. Pero Maridomingui demostró lo buena que era al dar a dar saltos de alegría.
-Las flores, las flores. Estarán preciosas cuando las abonemos con estiércol. Se lanzó sobre el carbonero y le dio un gran beso.
Maricastaña que volaba con su escoba por encima de la casa gritó de rabia porque había perdido su apuesta, dejó el cofre de oro en la puerta y salió volando.
Y con el oro…
Maridomingui y el carbonero compraron una vaca, una cabra, un caballo, un ganso y un gallo y con todo lo que les sobró esa navidades el carbonero repartió regalos a todos los niños del pueblo y así sigue todavía, aunque muchos lo conocen como Olentzero.
Cada nochebuena Olentzero, reparte sus regalos en el pueblo y en la ciudad cantando su canción...